martes, 4 de septiembre de 2012

EL CABALLERO OSCURO DE NOLAN

Cuando en 1989 Tim Burton nos ofreció su particular visión de Batman, hubo una opinión generalizada de que se trataba de un ejercicio de estilo ciertamente brillante, una visión que difería en cuanto a escenografía a las alocados versiones televisivas de los 60, aunque en el fondo quizás no existía tanta diferencia. Ambas propuestas eran una apuesta por lo grotesco y, en cierta medida, por lo delirante. Bajo esa capa de oscuridad Burtoniana, se escondía un regusto por el esperpento. De hecho, tales tendencias se confirmaron en la segunda entrega, "Batman vuelve", con una clara apuesta por la excentricidad, salida directamente de la visión onírica de un Browning puesto al día. A pesar de las opiniones que consideraban esta segunda propuesta de Burton como magnífica, no sería capaz de sumarme a esa corriente y si a la de los que estimaron que aquello era una exageración grotesca, por otra parte no demasiado alejada del universo del señor de la noche. Con Joel Schumacher vendría su visión de colorines con pinceladas gay, o lo que se podría considerar simplemente como desastre chillón y hortera.


Después llegó Chritopher Nolan y cambió radicalmente no sólo el concepto que se tenía del mismo Batman, sino de los superhéroes en general. Las aportaciones de Raimi en SpidermanBryan Singer en X-Men habían sido a todas luces interesantes y se rompía con un recorrido algo chusco e infantil de los personajes salidos del cómic. Pero, el tratamiento que concedió el director británico a un personaje del carisma de Batman, merece mención especial. No se trata de que se haya eliminado cualquier factor mínimamente infantil o directamente estúpido e inverosímil, sino que se ha vestido al personaje de una realidad y respecto que le convierten en todo un referente.

El inicio de la nueva saga no dejó a nadie indiferente y el director de "Memento" nos ofrecía un punto de partida más que esperanzador. Uno salía del cine con cierta satisfacción y con la opinión certera de que había visionado algo distinto a lo mostrado hasta entonces, unos cimientos firmes donde sustentar un héroe contradictorio y oscuro como era Batman. El primer acierto fue la elección de Christian Bale, un actor que le confería al personaje entidad y fundamentalmente presencia. Pero, si además contábamos con unos secundarios de lujo como eran Liam Neeson, Gary Oldman, Michael Caine y Morgan Freeman todo iba encaminado al éxito. Éxito, por otra parte, que era debido fundamentalmente a una buena historia alejada del esperpento guiñolesco o de la excentricidad más inapropiada. Además se dotaba al personaje de un enemigo de la talla de Ra's al Ghul y su inquietante Liga de las sombras, sin caer en la estupidez congénita de la parodia.


"Batman Begins" era una muy loable introducción de los orígenes del personaje de la factoría DC Cómics y nos sirvió en bandeja su segunda entrega, una obra maestra sin paliativos del género. "El caballero oscuro" es un film monumental, con un malo extraordinario interpretado por un actor en estado de gracia, Heath Ledger, que ganó un Oscar póstumo al mejor secundario, cuando en justicia debió haberlo obtenido como mejor actor. El planteamiento del segundo trabajo firmado por Nolan es la construcción del héroe dual, representado por dos personajes con fines comunes y procedimientos divergentes. Uno de ellos es Batman, que ejerce sus métodos contundentes por medio de la puesta en escena, de la teatralidad de la que hablaba su mentor Ra's al Ghul, y cuyo único fin es impartir justicia inyectando el miedo de las sombras en las que habitualmente combate. El otro, nuestro caballero blanco, es  el Fiscal del Distrito Harvey Dent, cuya intención es limpiar las calles de Gotham aplicando la ley y eliminando la corrupción. Pero ambos personajes se cruzara en el camino de un pérfico y enloquecido Joker, el señor del caos y la anarquía. Su plan maestro es destruir la intachable condición del hombre íntegro que representa Harvey Dent. A un personaje como el interpretado por Ledger no le interesa el poder y el dinero, solo pretende arrastrar con su locura a los demás, sean estos señores del crimen o representantes de la ley. Como él mismo dice, su única motivación se podría equiparar a la que siente un perro cuando persigue a un coche.


"El caballero oscuro" destila honestidad y escapa de compromisos comerciales que puedan hipotecar la historia que quiere contar. Así nos ofrece un final poco común en el cine comercial. La chica muere y el fiscal Dent, deformado, se torna malvado e imparte justicia de forma contundente, aplicando la pena de muerte con el azar de la suerte que le otorga su nuevo álter ego, Harvey Dos Caras. Todo este giro argumental obliga a los protagonistas, Batman y el jefe de policía Gordon, a perpetrar una mentira. Mentira que servirá para forjar los cimientos de la tercera entrega, cuyo comienzo es un claro referente de esa patraña urdida para evitar manchar el nombre de un hombre honesto como era Dent, e impedir que el plan siniestro de Joker triunfara. La película comienza con una brisa pesimista de remordimentos, con la pesada losa que representa la mentira, aunque sirviera para combatir el crimen, teniendo el alto precio de difamar a un héroe como Batman. En Gotham se respira una calma aparente fundamentada en la ley que ha puesto a la mayoría de los delincuentes a buen recaudo. Esa especie de velo blanco hace que Bruce Wayne lleve desaparecido de escena unos cuantos años, inspirándose en una especie de Howard Hughes aislado y ciertamente antisocial. Pero es solo un mecanismo dormido que despertará de su sueño ante la irrupción de un villano como Bane, que, a diferencia de Joker, si tiene un plan escrupulosamente urdido y recubierto de una masa muscular de cierta consideración. Es el momento del regreso del Señor de la Noche y de que las mentiras se derrumben. 


Hay en "En el caballero oscuro: La leyenda renace", una destrucción del mito de Batman y un nuevo resurgir, que transcurre en ese pozo infernal que representa el viaje iniciático hacia un nuevo concepto de héroe. Además la sociedad civil, representada por las fuerzas policiales, toma conciencia de su responsabilidad y lucha codo con codo junto a Batman, en una escena memorable que pasará a los anales de la historia del cine. Algunos, a los que se le ha ido de la mano su concepto de hiperrealidad de la propuesta de Nolan, encuentran fallos en ciertos momentos de pura épica. He leído que no se entiende como Batman se entretiene, en una lucha contra el crono, en dibujar la gigantesca figura del murciélago en llamas sobre el puente. Olvidamos que el lenguaje cinematográfico se sirve de esas licencias y la escena en concreto es impactante, en cuanto simboliza un regreso y un atisbo de esperanza. No se puede prescindir de ella por ese supuesto contacto con una realidad que poco tiene que ver con el mito fantástico.


Entiendo que la polémica se haya arraigado, sobre todo, entre los que creían que Nolan sería capaz de firmar nuevamente una obra de la envergadura de su segunda entrega. No son pocos los que se han cebado en ella, mostrando su disconformidad por no llegar al nivel esperado. Pero es un error monumental menospreciar esta última propuesta, pues el desafío era ciertamente complicado. "El caballero oscuro" era abrumadora desde el primer plano hasta el último, no deja un momento de respiro y, en ese sentido, la tercera parte de la trilogía tarda algo más en arrancar, aunque, cuando llega el momento, sabe arrastrarte y noquearte ante las escenas que ofrece. Todos luchamos, de una forma u otra, en esa escena callejera de lucha cuerpo a cuerpo. Que Bane no tenga el carisma de Joker es evidente. Primero, porque la máscara no permite demasiado lucimiento facial y segundo, porque Ledger interpretó su papel de forma magistral, como si supiera que su vida llegaba a su fin y lo diera todo de sí mismo. En lo que comparto las críticas es en ese final, con apariencia de añadido. Un "happy end" aparente, pues solamente se desvela a uno de sus protagonista, un impresionante Michael Caine que borda su papel. Una  recompensa a un actor irrepetible y de carácter. Puede que la trilogía filmada por Nolan tenga sus altibajos, pero representa una parte incuestionable de la mitología de los superhéroes, un punto de vista a tener en cuenta y una referencia en la que, no cabe duda,  futuros directores del género tendrán como guía fundamental.

40 comentarios:

  1. La tengo que volver a ver, pero vamos que yo me senti algo decepcionado.Nolan también se equivoca y bajo mi punto de vista en esta entrega ha cometido algunos errores graves. Pero claro, después de los dos joyones anteriores a ver quien se lo tiene en cuenta...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Era muy difícil alcanzar el mismo nivel en las tres partes, eso no lo hizo ni Coppola con El Padrino.

      Eliminar
  2. Jo, es que esta última entrega aún no la he visto, pero comparto contigo lo de que la segunda es genial.

    1besico!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues no pierda la ocasión y complete la trilogía. Merece la pena.

      Eliminar
  3. Nolan ha desaprovechado la ocasión que se le presentaba para realizar una versión del Dark Night de Miller. Ese comienzo con un Batman desaparecido durante 8 años es prometedor pero se pierde en cuanto llega esa trama más digna del James Bond de Roger Moore con bomba atómica incluida.
    Bane siempre ha sido un villano de opereta que solo resultaba interesante por el uso de la droga Veneno, el Bane de Nolan es el mismo villano de opereta pero sin drogas.
    La conclusion de Batman se vino abajo con la muerte de Ledger, este hecbo hundió los planes originales que consistian en el regreso del Joker. Nolan ha intentado salir del paso pero escenas como la ridícula pelea entre polis y villanos estropean el resultado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ignoro si volver con Joker hubiera sido algo positivo, algo que garantizase que la tercera entrega sería igual de buena que la segunda. Eso es algo que nunca se podrá saber. Esto del cine es tan subjetivo que lo que a usted le parece ridículo a mi me parece estupendo. Gustos como colores.

      Eliminar
  4. Comparto plenamente tus comentarios acerca de los Batman de Burton, Schumacher y las dos primeras de Nolan.
    Con respecto a la saga de Nolan yo añadiría dos aciertos más: por primera vez, gracias a Nolan/Bale, el personaje de Bruce Wayne adquiere el mismo protagonismo que el de Batman. Otro de los aciertos (sobre todo en la segunda entrega) es que Gotham y sus ciudadanos son tratados con tanto realismo que dejan de ser un telón de fondo para ser otro protagonista más en la historia. Burton optó por una imagen de fábula gótica para resaltar la fantasía de la historia, mientras Nolan apostó por dar una imagen lo más realista posible (ejemplos en "El caballero oscuro" serían el arranque con la panorámica de la ciudad antes del atraco al banco, el funeral del alcalde, los desalojos a los hospitales, la escena de los barcos, etc.)
    En cuanto a la última película he de decir que la encuentro decepcionante. Si la anterior era un guión trabajado y sugerente, realizado para que el público se sintiera cómplice y participara de él, en ésta todo está machacado y triturado para no tener que hacer la más mínima digestión. ¿Dónde está esa sutileza de contar las cosas con pocas palabras o simplemente con imágenes? (piénsese, por ejemplo, como Dent sabe de la muerte de Rachel simplemente al ver el estado carbonizado de la moneda, un "toque" digno de Lubitsch. O la delicadeza con la que se trata el tema de la carta de Rachel haciendo al público cómplice de su ocultación por Alfred. O, en fin, simplemente el apoteósico clímax del final en toda su tragedia y melancolía). Todo en esta última entrega me resulta tosco y burdo (¡qué manera tan torpe de desvelar el secreto de la citada carta!); se usa y abusa del sentimentalismo fácil en todas las escenas de Alfred (Caine se tira toda la película lloriqueando o apunto de hacerlo); el final me resultó predecible desde el mismo momento en que Alfred comenta la anécdota por primera vez… Por no hablar de algo que no debe hacer jamás un guión: TRAMPAS. La película salta por los aires el código moral de engañar al espectador (si Batman sabe lo que NO va a pasar ¿a qué vienen esos primeros planos de rostro sudoroso, angustiado y resignado mientras conduce la nave al final de la película?). Por no hablar de los “sapos” que hay que tragarse porque sí: lesiones de columna vertebral curadas en pocos días con una cuerda y un par de rodillazos; lectura de la carta de Gordon por parte de Bane que toda la ciudad cree a pie juntillas sin una sola prueba de su autoría; bomba que no explota a pesar de los múltiples topetazos en el transporte; polis y delincuentes armados hasta los dientes que en su enfrentamiento final dejan las automáticas para darse simplemente de mamporros, etc. O ese pobre recurso (digno de la peor “Serie B”) de no matar al héroe cuando se tiene oportunidad y dejarlo vivo para que aborte los planes de los malvados (de camino tampoco matamos a la poli para que se pueda rebelar). ¿Y qué decir de la INEXISTENTE relación entre personajes, tan trabajadas en las dos anteriores (¡Ay, esos diálogos entre Fox y Wayne, por poner un ejemplo!).
    Lo que más me gustó, contra pronóstico, la Catwoman femenina y sofisticada de Anne Hathaway, más próxima a Audrey Hepburn que a una heroína de látex.
    Por resumir: “Batman Begins” es una excekente película, revitalizó la serie; dio aire fresco al personaje y creó gran expectación (creo que le falta un pelín de ritmo). “El caballero oscuro” es, a mi juicio, una obra maestra. “La leyenda renace” se deja ver (a pesar de su metraje no se hace tan larga) pero me decepciona comparada con las otras dos.
    En fin, Pepe, perdona la parrafada, estupenda entrada y me encanta poder participar en tu blog.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En primer lugar, gracias por su comentario, que aunque disiente de mi entrada, me alegra que haya sido capaz de escribir algo que merecía ser publicado en su blog como un artículo en toda regla. Supongo que no nos pondremos de acuerdo, aunque es evidente que la segunda entrega es insuperable y, en mi opinión, la tercera se cierra de forma digna. En muchas ocasiones no hay que buscarle demasiada realidad o lógica a lo que es pura ficción, dejar pasar un poco la mano. Cierto es de reconocer que me dejo llevar por la mano de Nolan y me hace perder cierta distancia crítica, pero comparadas con otras propuestas del género, no hay color, incluso con esta irregular tercera parte. Algunas veces hay que dejarse llevar por la épica sin preguntarse por qué, sobre todo si está bien dirigida y con algo sustancial al cine, como es el pulso narrativo.

      Eliminar
  5. No puedo opinar sobre este tema porque no he visto ninguna de estas películas. Buena entrada, Cahiers, muy interesante.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues ya sabe lo que le voy a decir y a riesgo de ser cansino, no pierda la oportunidad de un sereno visionado que a buen seguro disfrutará.

      Eliminar
  6. Opino que el primer Batman de Tim Burton está muy bien. Es cierto que hay extravagancia y exageración, pero ese aspecto delirante, como muy bien comentas, se debe sobre todo, a mi modo de ver, a la aportación que le hace al film el villano interpretado por Jack Nicholson y todo lo que cae bajo su influencia. Pero hay que pensar que éste es un personaje que se presenta ante nosotros como un auténtico showman, pero un showman que es un psicópata y que de tonto no tiene un pelo. En ese sentido tendría similitudes al que interpretó Heath Ledger en El caballero oscuro, aunque éste sin lo circense de aquél. Creo que lo interesante del primer Batman de Burton es su aspecto oscuro y sus referencias al cine negro clásico, aunque Kim Basinger no fuera una femme fatale como cabría esperar.

    Muy de acuerdo con las consideraciones que haces con respecto a las de Schumacher. Para mí sus Batman dejan mucho que desear.

    Y con respecto al comentario sobre los Batman de Nolan, nada más que aportar. Estoy muy de acuerdo con tu interpretación. Son magníficos, tremendamente entretenidos y con su “seriedad”.

    Un saludo, PEPE. Estupenda entrada. Muy completa además…

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De no existir el Batman de Nolan, siempre tendría como referencia del personaje la puesta en escena de Burton. Al final, resulta que son tan buenas ambas propuestas como distintas. Es cierto que Basinger no fue una femme fatale, supongo porque el papel tampoco lo requería, aunque estaba realmente atractiva, algo que Nolan no ha conseguido del todo con su elenco femenino.

      Eliminar
  7. Hola Sr. Chaiers, que buena entrada.

    A mi la primera de Batman de Burton me encantó, y aunque soy mas lector de Marvel, me encanto ver Batman reanimado por dicho director. Ahora bien, a partir de la aparición del pinguino el la segunda película, todo se volvio más cómico y estupido como en la serie de los 60 y en clara caida hacia el abismo.

    Pero repito, que la primera de Burton a mi me encanta, y mas si sale el amigo jack. :->

    Después llega la primera de Nolan, y Batman se reinventa, por primera vez el personaje coge su oscura personalidad, su poder y dinero, conjuntamente con su fuerte personalidad y se nos muestra todo eso como es. La primera estuvo bien... pero la segunda... ese Ledger haciendo de Joker, brutal, su mejor interpretación. Vi la película que dura dos horas y más como si fueran 10 minutos. Fue impactante, brutal sutil, sugerente y muy muy entretenida, no le pido nada más a una película.

    La tercera, al igual que la mayoria de sus contertulios, Sr. Cahiers, me ha gustado y mucho; y pone el broche final a esta excelente trilogia. Pero nunca podrá superar a la segunda.

    Y como dice Pablo Daffari "O ese pobre recurso (digno de la peor “Serie B”) de no matar al héroe cuando se tiene oportunidad y dejarlo vivo para que aborte los planes de los malvados" , solo esa escena me hizo aborrecerla por 10 minutos, por suerte... el final es épico, y como usted comenta, me engulló completamente.

    Es cierto Sr. Cahiers, que a veces solo hay que dejarse engullir por la magia del cine, y no pensar en lo increible o real de una película, porque todos sabemos que es mentira, de principio a fin.

    Toda película es mentira... pero que seria de nuestras vidas sin estas maravillosas mentiras.

    Una muy buena y completa entrada.

    Un abrazo muy fuerte Sr. Cahiers.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Esa primera versión de Burton, con su oscuridad y con esos escenarios fue muy loable. La visión de Nolan fue un tanto distinta e hizo que otras propuestas parecieran más cercanas a la comedia. Y estoy con usted, al cine hay que ir para evadirse, para escapar de la realidad, aunque eso no signifique comulgar con ruedas de molino.

      Eliminar
  8. A mi me encanta la trilogía de Nolan, siendo sin duda las dos primeras las más notables, pero esta tercera, aún por debajo, no deja de ser extraordinariamente atractiva...y es que posiblemente el personaje de Batman es todo un bombón cinematográfico, que en manos apropiadas da un juego extraordinario (las de Spiderman no llegan ni por asomo a ese nivel)...creo que dentro del mundo de los superhéroes sólo las de la Patrulla X se acercan a esa brillantez...por cierto interesantísima la precuela de la saga...pero eso es otra historia...y por cierto Sr. Cahiers, imposible no ver referencias fordianas en El caballero oscuro, con esa historia idealizada, propia de Fort Apache, o de El hombre que mató a Liberty Valance.
    Buenas reflexiones Sr. Cahiers.

    (Y dígame usted...¿Que hacemos con nuestra amiga Clementine?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿Y qué quiere usted hacer conmigo, Tirador? ¿Y por qué se lo pregunta a Cahiers y no a mí?

      Eliminar
    2. No olvide tampoco la adaptación de Watchmen, que merecería capítulo aparte por ser una visión no demasiado corriente del mundo de los superhéroes. Ultimamente descubre usted muchas conexiones con "El hombre que mató a Liberty Valance", y ciertamente que existe cierta coincidencia, aunque aquí no se trata de llevarse la gloria ajena, sino todo lo contrario. Interesante observación. ¿Qué hacemos con Clementine?. No tengo ni idea, ya sabe que para esto del cine es muy particular.

      Eliminar
    3. ¿Es bueno ser particular, Cahiers, como el patio de la canción?
      Recomiéndame tus tres adaptaciones preferidas del cómic al cine aparte de esta trilogía de Nolan.

      Eliminar
    4. Claro que es bueno ser particular como el patio, que además no se moja como los demás.X)
      Tres películas:
      Watchmen
      Spiderman 2
      X-Men 1 y 2

      Eliminar
    5. Pese a que yo cuento cuatro me las apunto en la lista de ver "vaya usted a saber cuándo" pero de ver al fin y al cabo. Y si se da la feliz ocasión te lo cuento. Gracias, huraño eremita.

      Eliminar
    6. Apunto las mías por divertimento cinéfilo:
      -Watchmen
      -X Men 1-2 y Orígenes..

      ¡Anda, me salen cuatro también!!!

      Eliminar
    7. Me valen, me valen también las tuyas, Tirador, aunque sea por divertimento cinéfilo. Curioso, diferís en una... pero ninguno de los dos sabe contar.

      Eliminar
    8. Bueno, no crea, son algo más que divertimento, algunas tienen una carga de profundidad más que compleja.

      Eliminar
    9. Cahiers, creo que el otro señor y yo nos referimos con divertimento cinéfilo al hecho de que él apunte también sus preferidas. No dudo que haya adaptaciones de éstas que tengan su dosis de profundidad y si además salen Caine y Freeman ya ves tú.

      Eliminar
  9. Para mí, la última película es la mejor de la trilogía de Nolan. Es la única que me ha entusiasmado, y es la que tiene el mejor villano, un enemigo intimidante.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegra ver que hay alguien que disiente de la opinión general. Es una forma de ir nivelando la balanza.

      Eliminar
  10. Batman nos pone fanáticos a todos! es verdad que Nolan creó un monstruo cinematográfico mas creíble y real, pero eso no la hace mejor que las de Burton a mi entender... es un personaje de comic !! esa realidad aparente hace que se dude de la valía de esta tercera parte...

    a diferencia de muchos, pienso que el Joker de Nicholson es insuperable... ese Joker es mas real con su humor histérico, su farsa y su energía desmesuradas... menos oscarizable claro pero mas tangible como personaje...

    Nolas fue mas que Raimi para Spiderman, y es oque hablo de los 2 mejores directores de comics de los ultimos años... salu2

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para mi es difícil establecer quién lo hizo mejor, depende un poco del gusto y las tendencias de cada uno, pero lo cierto es que Nicholson hizo un poco de sí mismo y Ledger hizo una interpretación legendaria. Pero, insisto que depende lo que uno busque o quiera encontrar.

      Eliminar
  11. Pepe:
    Tengo la sensación de haber pasado por aquí antes, pero m busqué entre los seguidores y no estaba.
    Me gusta tu espacio, a pesar de que yo tenga un blog de literatura, el cine es mi pasión.
    Un abrazo.
    HD

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues es posible, cualquiera sabe. De todas formas, sea bienvenido a la Guarida. Cine y literatura siempre han tenido un vínculo de mutua inspiración. Saludos.

      Eliminar
  12. Pues suscribo sus comentarios salvo por la última película. La obra homónima de Frank Miller tiene temas mucho mas potentes que la simple vindicación del héroe caido en desgracia y la falta de un adversario moral lo reduce a una contienda física. Por otro lado me alegro de poder leer esta entrada, es un magnífico resumen de lo que ha dado de si el murciélago en el cine - y esperemos que no sea lo último.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas vece es complicado plasmar en su totalidad un cómic y si tiene la carga de profundidad de Miller, aún más, pero en su conjunto la obra de Nolan alcanza cotas de gran brillantez y otras menores.

      Eliminar
  13. Obviamente, la última entrega de Nolan pierde en comparación con su predecesora (aunque está bastante por encima, a nivel de entretenimiento, de Batman Begins, que a mi siempre me ha parecido -y mantengo esa opinión- bastante insulsa). Eso no quita que por sí sola sea una buena película con, eso sí, innegables errores en su guión que no deben pasarse por alto a causa favor de un fanatismo cegador.

    En cuanto a las de Burton, pues también me encantan. Me gusta su tono y su estética. Es diferente, es más fantástico y puede ser tan estimulante como el Batman de Nolan.

    Evidentemente, ambas versiones juegan en distintas ligas (de hecho, la versión realista de Nolan juega de por sí en una liga distinta a la del resto de films de superhéroes), pero yo no elijo a una o a otra sino que me quedo con ambas, porque ambas son realmente disfrutables. E insisto, una NO es mejor que la otra sino que son diferentes.

    Muchos preferirán ahora quedarse con Nolan por su fidelidad con el cómic y despotricar de mala manera las de Burton, cuando resulta que han sido y siguen siendo de lo mejorcito de su género. Tanto unas como otras me parecen igual de válidas. Si se prefiere algo con más enjundia, se recurrirá a Nolan, y si se prefiere algo más fantástico y extravagante (discrepo completamente que resulten grotescas), se recurrirá a Burton.

    De hecho, casi diría que me considero afortunado por poder disfrutar de ambas versiones libre de prejuicios y fanatismos absurdos :)

    Saludos ;)

    P.D.: Las de Schumahcer son un espanto. Ahí el consenso es lógico.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El consenso es también respecto a Burton y Nolan. Ambos son dos visiones distintas e igual de válidas. A mi "Batman Begins" si me pareció muy interesante, como elemento de introducción al personaje y, teniendo en cuenta donde había dejado el mito Schumacher, pues fue recibido hasta con vítores, si fuera posible.

      Eliminar
  14. Me gusta la visión de Burton sobre todo por sus guiños cinéfilos pero comprendo que el público también desea una versión más adulta de Batman, el más oscuro y siniestro de los superhéroes. Al menos creo que ha sido una propuesta más interesante que el "más de lo mismo" que han perpetrado con Spiderman. Saludos. Borgo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ese Batman de Nolan se ha convertido en un referente a imitar. Otra cosa distinta es que se tenga el talento para hacerlo.

      Eliminar
  15. El Batman para adultos parece que debe dejar a un lado a Robin...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Nunca ha sido santo de mi devoción Robin, aunque en este última entrega se le da algo de protagonismo, aunque sea solo como una especie de epílogo.

      Eliminar