jueves, 17 de mayo de 2012

EL AEROPUERTO


Caminaba algo confuso entre los miles de coches que dormitaban en el aparcamiento casi infinito del aeropuerto. Cuando llegó a su plaza, observó con zozobra que su automóvil no se encontraba donde debería. Ya no estaba muy seguro de haberlo aparcado en ese lugar. Se atusaba los cabellos en un mar de dudas, mientras un avión rompía el silencio precario de aquellos cielos grises y plomizos. Pensado que se había equivocado, se dispuso a recorrer las cercanías esperando tropezarse con su coche. Pero pasaba el tiempo y no conseguía encontrarlo. Tomó su móvil para llamar al encargado del parking y contempló con cierta irritación que no tenía cobertura. Se maldijo y empezó a tener el presentimiento de que este no iba a ser su día. Entró al aeropuerto y se sentó en una sala inmensa, en donde transcurría un incesante ir y venir de sueños y maletas. Sacó su portátil para enviar un correo urgente y, cuando emergió la ventana de la contraseña, se percató aterrorizado de que no se acordaba. Un hombre que estaba sentado junto a él, al contemplar su inquietud, le dirigió unas palabras que no llegó a entender. Debe ser extranjero, pensó, pero su alarma llegó a límites insospechados cuando ni él mismo lograba articular ninguna palabra coherente. En lugar de ello, emitía unos sonidos guturales incomprensibles, lo que le produjo una gran angustia. El sudor comenzó a inundar su confuso rostro y, cuando el corazón se agitaba desbocado, se despertó. Desorientado, pensó que había tenido el sueño más extraño y confuso de su vida. Se levantó balbuceante y, aprovechando la luz de la hoguera, prosiguió decorando la cueva con una ilustración de la cacería de mamuts del día anterior.


19 comentarios:

  1. El final tiene gracia... y es inesperado, desde luego.
    Yo lo iba leyendo y pensaba que el tipo se había equivocado de avión y había acabado en otro país sin enterarse...pero ya veo que no era eso.
    Un saludo.

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  2. Muy bueno el relato. Se intuía que era un sueño… se puede decir que premonitorio. Podía ser un chamán primitivo ;-D

    A mí un día me ocurrió algo similar. Dejé el coche aparcado en un barrio de Vigo que apenas conozco para tomar algo con unos amigos, y después, casi de madrugada y con una cogorza considerable, no logré encontrar mi coche. Me tiré más de una hora andando y andando desorientado y bastante cabreado diciéndome que no era posible aquello. Al final lo encontré, pero para mí fue dura la experiencia. Para colmo hacía bastante frío y no iba bien abrigado. Fue una jodienda.

    Un saludo, PEPE. Hasta la próxima.

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  3. Jeje, lo de buscar el coche sin éxito es algo habitual. Fíjate que yo una vez hasta fui a la comisaría a denunciar el robo del mío y los policías salieron a buscarlo... y lo encontraron en otro sitio plácidamente aparcado. Me dijeron que siempre hacían eso antes de cursar las denuncias porque a la gente se le olvida donde deja el coche, se ve que no soy la única con mala cabeza. Mal de muchos... ya se sabe.

    Me ha gustado Pepe, Un saludo

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  4. jejeje ¿se despertaría de nuevo, en el aeropuerto?

    besos,

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  5. Muy buen relato, Cahiers. Yo una vez tomé un vuelo destino Cracovia con escala en Estocolmo donde subieron unos suecos borrachos que tenían bastante de trogloditas. Creo que en los masificados aeropuertos todos perdemos algo de nuestra identidad como tu protagonista. Saludos. Borgo.

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  6. Tecnofobia premonitoria angustiosa, tipo La Cabina. Interesante.

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  7. Y años más tarde descubrieron en los secretos recovecos de Altamira las pinturas de un hombre de neanderthal...los expertos afirmaron ver mamuts, otros afirmaron ver cazadores. Un niño le dijo a su madre. "Parece un avión."

    Ja ja ja.. Sorprendente y gracioso final, menos mal que el primitivo despertó de su sueño. :-D

    Un abrazo Sr. Cahiers.

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  8. Al principio he pensado " pero si a cahíers lo de viajar no le va mucho" y lo leía esperando un giro inesperado....pero reconozco que tan inesperado me ha sorprendido. Es cierto...igual en la prehistoria tenían flashes de nuestro presente...que alucinante! Me ha encantado!

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  9. Muy bueno. ¿Sueñan los trogloditas con computadores electrónicos?
    Saludos.

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  10. Mr. Cahiers, muy buen relato, en un principio crei que el personaje, sin saberlo él, se encontraba en un aeropuerto de una dimension parelela. Muy Bueno. Un saludo.

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  11. Muy, muy bueno Pepe. cuando pensaba que me iba a meter en otro relato Kafkiano más, ha dado un giro de 180 gradoS y ha conseguido que me riera.
    BRAVOOO!!!

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  12. David: Bueno podría haber sido una vuelta de tuerca al argumento de "La terminal".

    Javier: Seguro que era un chamán, esa especie de médico-brujo-consejero de la prehistoria.

    Mara: Resulta que eso de no encontrar el coche en un aparcamiento es un sueño que me atormenta frecuentemente. Seguro que tiene algún significado.

    Maslama: Podría ser, y transformarse en una obsesión del subconsciente.

    Miquel: Hay algo de confusión sintomática en los aeropuerto, un caos organizado, y si hay huelga de pilotos...

    Mr.Lombreeze: "Tecnofobia premonitoria", creo que lo define perfectamente.

    SBP: Pues no crea, hay por ahí algunas pinturas rupestres que dan para pensar. Lo puede comprobar en la siguiente dirección:
    http://tejiendoelmundo.wordpress.com/2009/01/30/los-cabezas-redondas-del-tassili-%C2%BFdioses-con-escafandras/

    Layna: Eso es cierto, ya sabe lo de mi síndrome de Boabdil, aunque algún aeropuerto he visitado alguna vez, siempre esperando a alguién.

    Licantropunk: A Philip K. Dick seguro que le habría parecido interesante.

    Belknap: Podría ser, y es que lo de las dimensiones paralelas tiene muchas posibilidades.

    Lazoworks: Gracias querido amigo, y es que siempre me han gustado los giros finales, aunque fueran tramposos, como ahora se califica a muchos finales de películas.

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  13. Estupendo micro o mini relato, Sr. Cahiers, con un atmósfera de angustia muy interesante, aunque debo admitir que esperaba algún zombie en su parte final!!

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  14. Tirador: Gracias, pero su obsesión por los zombies no tiene límites.

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  15. Al que más al que menos, a todos nos ha pasado algo parecido tras un agotador día de caza de mamuts. ;)

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  16. Piedra: Si, solo había algo peor, y es que desaparecieran los mamuts.

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  17. A mi me pasó una vez. Soñe que era un troglodita que no encontraba el aparcamiento del mamut.

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  18. Un ambiente digno de David Lynch con un final de sabor apocalíptico.

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  19. Lucifer: Pues fíjese, hoy sería complicado encontrar un sitio donde dejar el mamut, con tanta zona azul.

    Pablo: Estoy seguro de que ese futuro, presente para nosotros, es mas angustioso que la mera supervivencia de un troglodita, aunque tampoco sería fácil.

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