La primera vez que contemplé el retrato de Federico Madrazo de doña Amalia del Llano y Dotrés (Condesa de Vilches) , me llamó la atención su pícara expresión, su mirada y esa pose de mujer atractiva, de serena ironía. No es el típico retrato tradicional de seriedad y compostura, de nobleza impostada, de pose calculada en definitiva. Aquí hay alguien que comunica con la mirada, que sonríe discreta y enigmáticamente, que juega con la posición de sus brazos. Una mano que roza con sus dedos su delicado rostro y con la otra sujeta un abanico de plumas.
Como buena intriga, similar a la que destilaba la célebre película "La mujer del cuadro", a uno le hubiera gustado que tras el lienzo de Madrazo se ocultara una mujer de carácter libertino o enigmático, alguien que ocultara una vida sorprendente. Y no llegando a tales extremos, lo cierto es que doña Amalia si que fue una mujer verdaderamente brillante y polifacética, escritora, pianista y cantante ocasional, amazona, inteligente que organizaba representaciones teatrales en su propia casa, en donde en algunas ocasiones actuaba para el público allí presente. Una mujer singular que supo dar vida a la intelectualidad del momento.
“Linda era como un ángel la condesa de Vilches, como un ángel al que
Dios permitiese abandonar la solemne seriedad del cielo adoptando el reír
humano, porque, según los doctores en bellezas, la de la Condesa no habría sido
tan completa sin aquel soberano don de sonrisa y risa que le iluminaba el
rostro y le descubría el alma. Ahora caigo en que no había vestido, ni
mantilla, ni lazo, ni garambaina que no le sentase a maravilla. Caigo también en que sus
movimientos tenían una gracia especial, un cierto no se qué, un encanto
indefinible, que podrá expresarse cuando el lenguaje tenga la riqueza
suficiente para poder designar, en una misma palabra, la malicia y el recato, la
modestia y la provocación”
Episodios Nacionales. Benito Pérez Galdós
Nota: Gracias a un amable comentarista, que figura más abajo, parece ser que el texto en cuestión de Galdós no hace referencia a la condesa de Vilches, sino que pertenece a la obra del mismo autor "La corte de Carlos IV" y se refiere a una actriz, "una cómica del teatro del Príncipe llamada Pepita González o la González" (página 5), añadiéndose el texto impostado inicial de “Linda era como un ángel la condesa de Vilches, como un ángel al que Dios permitiese abandonar la solemne seriedad del cielo adoptando el reír humano, porque, según los doctores en bellezas, la de la Condesa no habría sido tan completa sin aquel soberano don de sonrisa y risa que le iluminaba el rostro y le descubría el alma..."
Es evidente que alguien con aviesas intenciones ha fusionado el texto para colarnos una incorrección histórica, lo cual es en sí mismo es una perversión de lo más sofisticado. Mis más sinceras disculpas y mi autoflagelación más contundente.
No escribía mal Galdós, aunque no fuese un escritor que me tirase demasiado ni el realismo fuese una corriente que me apasionara.
ResponderEliminarA la duquesa se le apreciaba no sólo belleza sino inteligencia en su dulce y serena mirada. No estaba nada mal, y eso que el concepto de belleza cambia con el tiempo, los cánones esos de los que suelen hablar tan entendidos estilistas ;-P
Un saludo, PEPE. Buena entrada… auque escribiera más Galdós que tú en este caso :-D ;-P
PD: A ver qué pasa con el Granda y el Celta, caray, que está la cosa fastidiada…
Ciao
La forma de su cara, su tez blanca corresponde efectivamente a los cánones de belleza de su época, aunque hoy en día tampoco carecería de atractivo, sobre todo por su mirada y la sonrisa.
EliminarNo me hable del Granada, que contento me tiene una vez más. Tengo la sensación de que este año no le salva nadie de la quema, por un par de poderosas razones. Cuando merece perder, pierde, y cuando merece ganar, también pierde. La victoria del Celta anoche nos mete a todos en un puño. Menudo final de temporada nos espera.
Es cierto, ahora mismo mucho más interesante por arriba que por abajo. De todas formas creo que el Celta lo tiene peor que el Granada.
EliminarHasta luego, PEPE.
No se que decirle amigo Javier, al Celta le veo mejor dinámica que al Granada. Además esa victoria in extremis ante el Zaragoza le va a dar mucha moral.
EliminarCahiers: ha descrito el cuadro de manera impecable. La verdad es que impresiona. Parece vivo, como si la modelo te estuviera traspasando con la mirada. Un retrato tan interesante como la modelo.
ResponderEliminarSaludos. Borgo.
Es un cuadro, que cuando lo ves, no pasa desapercibido, te cautiva esa mirada y esa pose simpática.
EliminarCierto, una pose poco habital para una aristócrata. Resulta curioso que esta condesa y la princesa Leia compartiran al mismo peluquero...
ResponderEliminarNo me había dado cuenta de esa similitud y vista ahora no me extraña, son muchas las cosas que Lucas aprovechó del pasado para incluirlas en su saga galáctica.
EliminarNo conocía este cuadro. Sí, me gusta mucho su pose tan despreocupada, y su mirada sobre todo.
ResponderEliminarUn beso Pepe
Una pose con cierta picardía, muy sugerente.
EliminarParece una mujer actual. un beso.
ResponderEliminarSi, sobre todo por lo que transmite, independientemente de la indumentaria y estilo muy concretos de una época.
EliminarMenudo baño de cultura nos das aquí, Cahiers, entrada de lujo ésta. Perfecta, me ha encantado leerla.
ResponderEliminarDe vez en cuando suelo interesarme por algún cuadro que me llama la atención, y este en concreto me pareció muy llamativo. Gracias Clementine, me alegra de que haya sido de su gusto.
EliminarMe ha encantado el cuadro, nunca lo había visto. Es cierto que no parece una pose nada calculada, más bien es un gesto que pone alguien dos segundos cuando le dicen que le van a sacar una foto. Y no solo la cara, la mano, y la posición del cuerpo. Mola.
ResponderEliminarLo ha definido muy bien, parece una instantánea de un momento único.
EliminarMr. Cahiers, bella mujer, saludos.
ResponderEliminarPara los cánones de belleza del siglo XIX sin duda, aunque tampoco se le puede negar su indudable atractivo en pleno siglo XXI.
Eliminarme ha gustado tu mirada, llenó de vida el retrato
ResponderEliminarbesos,
Gracias Maslama, sólo he intentado describir lo que veo, aunque algunas veces no es fácil.
EliminarNo conocía este cuadro y tienes toda la razón, la mirada te absorbe y hace que no te fijes en el resto de la composición del cuadro. Muy bonito.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Ese dato es lo que te hace detenerte un momento, lo que hace que perdure su recuerdo.
EliminarHola Mr. Cahiers,
ResponderEliminarRealmente el retrato de la condesa transmite algo, posiblemente lo que querria el pintor de esta obra.
Y es verdad que esa mirada coqueta y complice te animan a querer saber más sobre esta bella mujer.
Gracias Maestro por acercarnos al mundo de la pintura.
Un abrazo Pepe.
Ayuda también el hecho de que la condesa fuera amiga íntima de Madrazo, hay una especie de complicidad que va más allá del lienzo.
EliminarHuuum... es curioso, un amigo mio diria que el alma de la condesa quedó impregnada en el lienzo. Pero si es cierto que ese "algo" inexpicable se transmite. Que buena obra.
EliminarUn abrazo Pepe.
Son momentos únicos difíciles de repetir, por eso son tan notables y no pasan desapercibidos, amigo UTLA.
EliminarEs cierto que tiene una expresión pícara y divertida que te la hace simpática, más todavía en esas épocas donde ésto no era habitual. Si es cierto eso de que la cara es el espejo del alma, se sospecha un alma inquieta, traviesa y rebeldilla muy interesante.
ResponderEliminarBesos
Ciertamente, esa expresión se identifica con una mujer inquieta que desea ser protagonista de la época que le tocó vivir.
EliminarLa verdad es que tiene una mirada ciertamente enigmatica y seductora.
ResponderEliminarSi, ese efecto de juego seductor funciona tanto en el cuadro, como según parece ser en su vida cotidiana.
EliminarEs un cuadro que también me llama la atención, quizás por esos colores claros, tan agradables a la vista. De todos modos esas obras, previas a la revolución de los impresionismos han quedado un poco sepultadas, relegadas a un segundo plano...
ResponderEliminarPor cierto, Pérez Galdós estaba destinado al premio Nobel, pero intrigas (desde España) lo hicieron imposible...
Suerte deportiva para este sábado, Sr. Cahiers!!
Pudiera ser, y no siendo un enemigo del impresionismo, según para que cosas este tipo de realismo tiene mejores armas para dibujar una sonrisa o una mirada. Lo de Pérez Galdós solo podía pasar en España, tan cainita para algunas cosas.
EliminarSuerte, no se, quizás mejor un milagro, porque tal y como están las cosas...
Ese cuadro tiene una expresividad tremenda. Como ahora está tan en boga la Gioconda de El Prado, ya no sabe uno si llamar Gioconda a todo, ja, ja. Pues Madrazo no sería Leonardo, pero... ni falta que le hace.
ResponderEliminarSaludos.
Desde luego esta Gioconda es más atractiva que el original en mi modesta opinión, claro está, que gustos hay como colores.
EliminarUff, esperemos que a Dan Brown no se le ocurra un Código Condesa de Vilches jeje ;). Te dejo la dirección de un blog colectivo donde participo, por si gustas visitarnos http://distopiasensacionaldecultura.blogspot.mx/ y nuestra página de face https://www.facebook.com/DistopiaSensacionalDeCultura ¡Saludos!
ResponderEliminarBueno, no son pocos los cuadros que han servido como fuente de inspiración en novelas y películas, como por ejemplo la extraordinarias "La mujer del cuadro" o "Laura". Gracias por su visita, en cuanto pueda me acerco por ese blog. Saludos.
EliminarEl texto de Galdós comentando, supuestamente, la belleza de la condesa está sacado de su contexto y no se refiere a esta mujer. El texto, desde su segunda frase ("Ahora caigo...")pertenece a la obra de Galdós "La corte de Carlos IV" y se refiere a una actriz, "una cómica del teatro del Príncipe llamada Pepita González o la González" (página 5)
ResponderEliminarEl resto del texto, desde su inicio, no pertenece a esta obra de Galdós y desconozco si puede serle atribuido o no.
Es necesario verificar las citas antes de incluirlas sin más, con "copiaypega".
Saludos
Me permitirá usted semejante patinazo, y no solamente a mí, sino a las innumerables páginas web que atribuyen el texto de Galdós a la Condesa, incluida la del Museo del Prado que, aunque ya no aparece, si que figuró en su día. Ruego su indulgencia, y a buen seguro así será otorgada pues usted mismo anda despistado e ignora si el resto del texto pertenece o no a Galdós. Lo del "Copiaypega" me ha dolido cual daga en mis entrañas.
EliminarSaludos y gracias por la corrección Superprofe
Por cierto, he anotado su oportuna observación en el artículo. Podría sencillamente haber quitado el texto, pero lo que me cuenta es lo suficientemente interesante como para incluirlo.
EliminarSaludos cordiales
Gracias por la corrección, lamento que se haya sentido ofendido por lo de "cortaypega" pero, efectivamente, el texto circula impunemente por la red en varios lugares (a los que también he enviado la aclaración).
ResponderEliminarPara desfacer completamente el entuerto, el texto está dividido en dos partes: la primera pertenece a la obra "O'Donnell" de Galdós, efectivamente, pero no referido a la condesa de Vilches, sino a un personaje llamado Teresita Villaescusa, que aparece expresamente citado:
"Linda era como un ángel Teresita Villaescusa, como un ángel a quien Dios permitiese abandonar la solemne seriedad del Cielo, adoptando el reír humano. Porque, según los doctores en belleza, la de Teresita Villaescusa no habría sido tan completa sin aquel soberano don de sonrisa y risa que le iluminaba el rostro y le descubría el alma. A todos encantaba su gracia ingenua, y la amistad y el amor se le rendían." Esto es el inicio del capítulo V de la obra. La segunda parte del texto, como ya indiqué, pertenece a la otra obra de Galdós ya citada. Lo único que ambas tienen en común es pertenecer a una de las novelas que integran los Episodios Nacionales, pero cada una de ellas está incluida en una serie diferente.
La relación del texto con el cuadro es, pues, inexistente aunque, efectivamente, se le pueda aplicar.
Saludos.
Es una historia interesante y no logro entender exactamente por qué razón se ha manipulado para que se hiciera referencia al personaje en cuestión. No le encuentro ningún sentido.
EliminarSaludos