miércoles, 2 de junio de 2010

DONDE VIVEN LOS MONSTRUOS


Un grito desagradable y neurótico golpea mis oídos de forma considerable. Aparece un niño vestido de conejo o de gato, no lo tengo muy claro, saltando y gritando como un poseso. Lleva un objeto punzante y persigue escaleras abajo a un perro que huye como si le persiguiera una fiera corrupia o un ente poseído por un demonio desbocado. Después este niño, niñato o individuo no formado juega en la nieve donde se acaba de construir una especie de refugio subterráneo y como su hermana no le hace el mínimo caso, en parte por si le provoca un ataque y la persigue igual que al perro, se dedica a tirarle bolas de nieve a sus amigos y la cosa acaba con el destrozo del refugio y posteriores llantos y lamentos. En otra secuencia, como su madre no le presta la atención que tan molesto personaje requiere, le planta un mordisco y huye como alma que lleva el diablo. Se sube en una barca y se adentra en el mar. Llega a una isla en medio de la noche, donde una especie de monstruos observan como uno de ellos está destrozando sus casas. El niño, como es lógico, se une a la fiesta y ayuda a destrozar cuanto puede y está al alcance de su mano. Los monstruos se cabrean y deciden comérselo, porque no es de buena educación ir por ahí rompiendo las casas de los demás. Este le dice que en realidad es un rey, les cuenta una milonga sobre unos vikingos, y los monstruos lo proclaman monarca de aquellas tierras. Hay una monstrua, digo monstrua para que no se ofenda la ministra de igualdad, que ha abandonado al grupo porque a conocido a unos nuevos amigos, que, parece ser, le aportan más que sus antiguos compañeros. El chasco nos lo llevaremos cuando descubramos que los nuevos amigos son dos especies de mochuelos, cuya única habilidad es su expresión cercana a la estupidez más congénita. El monstruo líder se hace colega del rey-niñato y emprenden un viaje del copón, atravesando un desierto habitado por un perro gigante, para llegar a una cueva en donde hay una maqueta de donde viven los monstruos, pero nadie se acerca ya a este lugar para jugar... claro si está en el quinto copón!. Más tarde, a nuestro angelito se le ocurre jugar a lanzarse piedras y animales (si, han leído bien, animales). La cosa acaba mal, pues eso de tirarse a lo bestia piedras y mapaches al final te mosquea en cantidad industrial. Construyen una especie de castillo o empalizada con, me imagino, el objetivo de matar el tiempo. Se vuelven a cabrear y uno de ellos le arranca el brazo al otro. Pero no importa, será sustituido por una rama de un árbol de escasas prestaciones. Como el mal rollo es ya imparable, el niño rey decide marcharse a su casa, ante el pesar del grupo de neuróticos monstruos, toda una suerte de entes desesperados y desolados. Nuestro protagonista vuelve a su casa en barca y su madre, después de varios días desde su desaparición, le prepara una sopa caliente, ante la mirada indulgente de su vástago.

Este es el fascinante argumento de "Donde viven los monstruos" del sobrevalorado Spike Jonze, basado en un libro infantil de Maurice Sendak. Ignoro si el original destila el mismo desasosiego que la película, pero lo cierto es que el ambiente de neurosis de estos personajes se aleja ciertamente del universo de un cuento infantil tradicional. Y no es que los cuentos estén exentos de crueldad y oscuridad, pero, en la mayoría de los casos, suelen ser claros en cuanto a los roles de sus protagonistas y sirven como guía universal del enfrentamiento entre el bien y el mal. Pero una película que aburre a adultos y que, por su tono depresivo, puede ser incomprensible para los niños, no cumple ningún objetivo ni se mueve en una dirección lógica.

12 comentarios:

  1. Asombroso. Deberían de censurar estas cosas...

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  2. Tengo dos alimañitas y les pasó como a mi, nos dormimos profundamente en 15 minutos viéndola en el sofá. TOSTÓN.

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  3. Una película diferente y un poco extraña para la mayoria ,refleja sobretodo los miedos del niño ante los adultos y su incomprension ante ellos ,no es para tirar cohetes ,pero tampoco muy mala ,un bien justito,saludos!

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  4. Bueno, Marcos, quizás censurarla sea algo extremo, yo creo que el tiempo la dejará en su justa medida.

    Estoy de acuerdo Alimaña, porque por encima de todo es bastante tediosa.

    No cabe duda Angel que la película simboliza algo como lo que tu indicas, pero que lo haga de forma acertada es otra cosa.

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  5. Buenas Pepe Cahiers, suena interesante lo escrito por usted, toda la pinta de un cuento bine, pero bien macabro, para ver, un saludo.

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  6. No crea Belknap, más que macabro, diría depresivo.

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  7. Desde luego no es una peli para niños, sino para el niño rebelde que los adultos llevamos dentro. No es la mejor de Jonze, pero es bastante buena para mi. Y desde luego que el cuento original es extraño, pero no tanto.
    Un saludo

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  8. No se, amigo Crowley, estoy seguro que la película encierra un significado dirigido a los adultos, pero a mi no me ha llegado de forma satisfactoria.

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  9. Todavía no la he visto -pero lo haré, lo haré-, aunque a mí Spike Jonze sí me gusta. Y mucho. Algunos de los videoclips que ha hecho, y sobre todo las dos pelis con guión de Charlie Kaufman -Adaptation y Being John Malkovich- me parecen peliculones. Claro que ésta que comentas aquí no cuenta con Kaufman -al que atribuyo buena parte del mérito, la verdad-, así que no sé yo...

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  10. "Como ser John Malkovich" tiene un estupendo arranque, aunque, para mi, va perdiendo fuelle hacia el final.

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  11. Yo creo que aunque "Dónde viven los monstruos" pueda estar en tierra de nadie y ser algo tediosa, está por encima de la media hollywoodiense. Quiero pensar que es más interesante de lo que aparenta (pronto la revisionaré).

    Eso si, yo soy bastante fan del trabajo de Jonze :P

    Saludos!!

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  12. Estimado Javier, por lo que me decís algunos por aquí, la película tiene más virtudes de las que yo puedo ver. Supongo que es cuestión de gustos.

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