Hace algunos días, huyendo de un canal deportivo para no sufrir más con la habitual derrota de mi querido equipo de fútbol, me paré un instante en uno de los canales de documentales de la TDT y me tropecé con algo que llamó poderosamente mi atención. Se hablaba de un descubrimiento ciertamente interesante, aunque con los minutos parecía convertirse en algo aún más espectacular. Habían sacado de las entrañas de un tiburón blanco unos restos de un animal como poco enigmático y, como si de un puzzle se tratara, los científicos iban analizando cada parte de su peculiar anatomía, llegando a la conclusión de que probablemente se tratara de una sirena. En ese momento, mi espíritu nada crédulo inició su particular batalla contra mi afición a los temas enigmáticos y la lógica me recomendó algo de paciencia. Conforme los investigadores estudiaban el cuerpo en cuestión, se recreaba cómo podía haber sido la evolución de esas posibles sirenas, desde tiempos remotos, cuando un homínido aficionado a los chapuzones decidió vivir en el mar y transformar su cuerpo para el medio acuático.
El problema fundamental es que, conforme se atrevían a desvelar aspectos cada vez más espectaculares, iba perdiendo credibilidad, hasta ofrecernos las primeras imágenes reales de una sirena, nítidas y tan claras que se veía a la legua que eran un engaño. Y efectivamente lo eran, perteneciendo al género llamado falso documental. Se trataba de "Sirenas: el cuerpo hallado", producido en el 2011 por el canal Animal Planet. En Estados Unidos, que son muy dados a creérselo todo y siempre tienen una mentalidad muy predispuesta a la alarma social cuando no al pánico puro y duro, este documental provocó una gran polémica. El Servicio Nacional Oceánico, tras recibir cientos de cartas, tuvo que salir al paso con un comunicado en el que manifestaban que no se tenía conocimiento alguno de la existencia de las conocidas sirenas. Mejor eso que permanecer impasible, dado el precedente del pánico de la noche del 30 de octubre del 1.938, cuando Orson Welles emitió en un programa de radio "La guerra de los mundos" de H. G. Wells.
En el año 2002 se rodó otro falso documental bastante interesante por parte de canal Arte France y que llevaba el título "Opération Lune". Se hablaba de un tema muy popular, que no era otro que el cuestionar si la llegada del hombre a la luna fue un fraude absoluto. Como es habitual, al principio uno se pregunta si todo la información que te van ofreciendo puede tener visos de realidad, pero, como todo documental apócrifo que se precie, su ambición es su perdición y, el ver a determinados hombres insinuar la escasa veracidad de la misión del Apolo 11, es determinante para que la incredulidad campe por sus anchas. Que un secretario de defensa, Donald Rumsfeld, el mismísimo Kissinger, el director de la CIA Richard Helms o el astronauta Buzz Aldrin manifiesten a las claras que todo fue una conspiración es algo tan poco probable como el de la existencia de las propias sirena. Al final del documental se nos ofrecen tomas falsas en donde los protagonistas dan rienda suelta a su buen humor, haciendo honor a la broma que acaban de gastar. No obstante, no deja de ser curioso que las imágenes de la luna se le atribuyan, en forma de leyenda urbana, a Stanley Kubrick, que en los 70 había solicitado a la NASA unas lentes especiales para rodar escenas a la luz de las velas en "Barry Lyndon". Los entusiastas de los enigmas parecen entrever una sospechosa relación en forma de turbio pago de favores, incluyendo una conspiración en toda regla. La realidad es algo distinta. En realidad las lentes las fabricó Carl Zeiss, empresa líder en óptica y visualización electrónica, vendiéndole 6 a la NASA y 3 a Kubrick. De todas formas, los aficionados a los misterios podrán seguir conjeturando sobre la veracidad de los hechos acontecido aquel 20 de julio de 1969, cuando Neil Armstrong estampó su huella en la luna. Mientras tanto, pueden aliviar sus inquietudes con el visionado de la película "Capricornio Uno" de Peter Hyams, en donde se nos cuenta una historia similar con el trasfondo de la conquista de Marte.
Hubo una vez en la que un falso documental si que me llegó a engañar, por los menos durante algún tiempo. Una de las premisas fundamentales para caer en la trampa, es llegar a ellos sin conocimiento previo, sin saber que existen. La mejor forma es tropezar con un documental apócrifo cuando se está zapeando, de esa manera te sorprende con las defensas bajas y, si a eso se une cierta pasión por lo insólito, ya tenemos los ingredientes necesarios para hacer el papel de incauto. Naturalmente, si el documental en cuestión quiere dejarte con la duda, nunca debe traspasar el umbral de lo razonable y debe navegar por el pantanoso terreno de lo probable, pero siempre con cierta bruma sobre la realidad empírica. Así sucedió un día, cuando vagando perezosamente entre canal y canal, me tropecé con una serie de la 2 titulada "Páginas ocultas de la historia", presentada por el periodista Felipe Mellizo. Claro que entonces yo lo ignoraba y, poco a poco, me fui adentrando en la curiosa y fascinante historia que nos contaba. Una periodista ficticia, Rocío Pérez, narraba la historia de un panadero, Rogelio Bermejo, quien le contó en 1976 que, en una mañana de aquel fatídico verano del 36 en los inicios de la guerra civil, encontró a un hombre herido de gravedad con dos balazos en el cuerpo y uno en la cabeza. Temiendo por su vida, lo trasladó al convento de San Bartolomé, en donde las monjas pudieron salvar su vida. El hombre, al que llamaban Manolo, quedó mentalmente afectado con la pérdida de la memoria. Vivió en el convento hasta su muerte en 1954, ocupándose del cuidado de los jardines. El tal Rogelio jamás supo que había salvado la vida de Federico García Lorca, hasta que un día acudió a una conocida sala X de la ciudad de Granada, en donde se percató de la identidad de aquel hombre cuando, en un reportaje previo a la película (ya es extraño que antes de una película porno se les ocurriera culturizar a la parroquia), se hablaba del poeta universal, autor de "Bodas de sangre", entre otras obras magistrales. Se acompañaba de una foto, obviamente trucada, en donde se podía ver al enigmático Manolo acompañado del tal Rogelio y las monjas del convento. Meses permanecí intrigado, sobre todo, por no comprender cómo una noticia de tal calibre no había tenido más repercusión en los medios convencionales, hasta que un día el amigo y blogero Tirador Solitario, me desveló que aquel reportaje pertenecía a una serie de falsos documentales perpetrados por Felipe Mellizo. Y es que una de las razones para desconfiar de este tipo de engaños es que, tales noticias, no aparezcan en la cabecera de los telediarios.
Si lo que se pretende es ver algo parecido en pantalla grande, lo mejor es empaparse de una de las mejores películas de Woody Allen, "Zelig", en donde se nos cuenta la historia de un curioso individuo, apodado el camaleón humano, que en 1920 se hace notar por adoptar la apariencia física del grupo de personas con las que se relacione en ese momento. Puede mimetizarse en cualquier personaje, desde un negro de Harlem, un obeso, un judío ortodoxo, o un nazi junto a Hitler. Como buen falso documental que se precie podemos ver entrevistas a todos aquellos que le conocieron, a expertos en la materia, psicólogos e historiadores. Se nos hace creer que el protagonista de este historia, Leonard Zelig (interpretado por el propio Allen), en realidad tiene un miedo patológico a ser rechazado y, por ese motivo, tiende a integrarse con los demás, imitando su apariencia y comportamientos. Con imágenes trucadas y convenientemente envejecidas, le podemos ver relacionarse con personajes históricos, aspecto al que se adelantaría a películas como "Forrest Gump".
Claro que, si queremos visionar algo más bizarro, habría que optar por "Holocausto caníbal", película polémica donde las haya, aunque en mi opinión no por voluntad propia. El argumento trata de la desaparición de un grupo de reporteros en la selva amazónica, que buscaba una tribu de caníbales y la posterior misión de rescate por parte de un antropólogo y sus respectivos guías. El resto se puede adivinar por las imágenes, mucha sangre y vísceras. La película fue acusada de snuff, es decir se pensó que las muertes que se mostraban eran reales, ordenando un tribunal de Milán requisarla y el arresto inmediato de su director Ruggero Deodato. Para contribuir a la confusión, el director les había hecho firmar a los actores un contrato en donde se les impedían aparecer en ninguna otra película durante un año, y el tribunal les dio por muertos al igual que la mujer que aparece empalada. Dado el cariz que tomaban los acontecimientos, Deodato mandó aquella cláusula al carajo y se presentó con los actores que se creían difuntos, amén de dar todo tipo de explicaciones de como se consiguió el truco de la mujer empalada.
Una entrada muy interesante, también a mí me gustan estos temas y la historia contrafactual (que se trata de hacer teorías imaginando qué habría pasado si un hecho histórico no hubiera sucedido o hubiera pasado de otra forma, por ejemplo, cómo sería el mundo si John F. Kennedy no hubiera sido asesinado), pero siempre sabiendo que no es cierto, no me mola creerme algo y luego descubrir que es falso.
ResponderEliminarHace tiempo vi un documental en la 2 que trataba de cómo sería la fauna de la Tierra dentro de miles de años, y salía cada cosa surrealista de flipar. No se me olvidará nunca una especie de pulpo que había salido del mar y vivía en las ramas de los árboles.
Estas cosas es lo que tienen, son curiosas, pero a veces salen pajas mentales de campeonato.
Recuerdo perfectamente ese documental que pertenece a una serie llamada "Futuro salvaje". Lo del calamar arborícola era muy curioso, al igual que otro de tamaño gigante que vivía en tierra y que se denominaba Calafante.
EliminarUhhhhh! Como me ha gustado esta entrada Pepe, muy, muy aleccionadora e interesante. No sabía lo de Holocausto Canibal, que además nunca me he atrevido a ver.
ResponderEliminarA mí estos falsos documentales también me gusta verlos, y con el coriano al lado para irlos comentando e ir pasando muchas veces del estupor a la incredulidad, y de la incredulidad a la risa, aunque seguro que alguno me habrá engañado.
Recuerdo uno sobre Jesucristo y todos sus secundarios, en el que todo se explicaba de forma completamente diferente, lo importante no era eso, vaya usted a saber, sino que cuanto más se empeñaban en demostrar determinadas cosas más credibilidad perdían, era tan poco serio y riguroso que no había quien se creyera nada, eso sí, como ejercicio de fantasía e imaginación era una obra de arte.
Besos
Es lo que tienen este tipo de documentales, que les pierde el sensacionalismo, quizás deliberadamente, para que descubras por ti mismo que es falso. Normalmente, los asuntos enigmáticos suelen ser menos concretos y más difusos. ¿Alguien ha visto una foto nítida del Yeti?. Si la ve, seguramente es falsa, aunque claro, las borrosas probablemente también lo sean.
EliminarAh! Me encanta el tema de los falsos documentales. Hombre, lo de la sirena no es muy creíble y no me hubiera enganchado.
ResponderEliminarEso del falso documental de Lorca lo había leído en algún sitio. En lo de
"(ya es extraño que antes de una película porno se les ocurriera culturizar a la parroquia)".. Jo! Siempre tienes alguna línea en tus entradas que me hace partirme a base de bien. Seguro que fue a la sala X a culturizarse el pobre hombre...
Capricornio 1 me gustó de crío (no me importaría revisarla).
La de Zelig es muy buena, pero sabes que es ficción y no llama a engaño al contrario que otros de estos documentales.
No he visto Holocausto Canibal (ni ganas), pero de niño, un amigo me decía que era verdad-verdadera y si esto y lo otro...
Hay un falso documental que sí me pareció cojonudo... Es sobre un astronauta anterior a Gagarin al que silenciaron en la URSS... Era este: http://www.youtube.com/watch?v=7npNk3EGKBQ...pero no recuerdo su título en castellano...Estuvo muy bien.
Luego está lo que hizo Peter Jackson sobre un falso estudio de Hollywood (pero no lo he visto).
A mí me gustan esas cosas como bromas, sí.
Un saludo.
Al principio del documental te engancha, porque comienza de forma discreta, con esos restos de un animal desconocido, cuando ya dan por hecho que son de sirena y sale a la luz un vídeo supuestamente auténtico es cuando ya la cosa pierde interés. "Zelig" es evidente que no es nada más que una genial broma sobre los documentales. "Holocausto Caníbal" vista en su época puede que impresionara, vista ahora bastante menos.
EliminarYo no termino de entender muy bien cuál es la finalidad del falso documental, bueno, es como ver un peli en definitiva.
ResponderEliminarLa de Allen no la vi, la tengo justo pendiente para verla en estos días.
Yo flipé cuando me enteré lo de Orson Wells, que la gente se lo creyó y se aterrorizó, jajaja, qué fuerte!
Besito Pepe
Lo de Wells fue absolutamente impresionante, pero me imagino que se debe al clima pre-bélico de la época, que les preparó para este tipo de psicosis, aunque desde luego fue un cúmulo de reacciones de lo más desproporcionado.
EliminarMr. Cahiers,¡ah, los documentales falsos!; "Holocausto Canibal", ¡que pelicula!, muy entretenida por cierto, tambien creo que hay por ahi, si mal no recuerdo, un falso documental sobre dragones. Tan falsos y tan entretenidos ellos. Un saludo.
ResponderEliminarIgnoro ese que comenta de los dragones y eso me ha hecho recordar la cantidad de fotos falsas que circulan por internet. Recuerdo unas sobre el descubrimiento de los esqueletos de una raza de humanos gigantes.
EliminarHola, PEPE… Bueno, el Celta tampoco va muy bien que digamos. Pero nos podemos dar ánimos como buenos amigos ;-D A ver si salen del túnel.
ResponderEliminarEsto de los falsos documentales es una buena engañifa. Deberían estar prohibidos :-P O es ficción o es real, nada de términos medios que pueden llevar a engaños. Lo del alunizaje no se sabe, hay quien cree todavía que es mentira, pero ahí, al parecer, no hay pruebas de que sea así. Creo que en este caso hay una gran leyenda urbana que divierte y nada más. De estas historias también se vive. Zelig de Woody Allen utiliza esa técnica para hacer una obra de arte simpatiquísima. Resulta una maravilla cómo y por qué se manifiesta esa empatía. Increíble peli.
Por cierto, PEPE, eso que cuentas de Holocausto caníbal ¿no será otra leyenda urbana? Me refiero a eso del juicio y que se presentara con los actores que se suponían muertos. Es que suena mucho a eso.
Un abrazo. Cojonuti la entrada. Se ha disfrutado :-D
Pues no falta mucho para que Celta y Granada se crucen. Podíamos firmar un empate amistoso, jajajaja. Lo de la Luna puede y seguro que es verdad, aunque a mi siempre me parece chocante que, en los tiempos del Seat 600 y las televisiones en blanco y negro que funcionaban con lámparas, se consiguiera alunizar en nuestro satélite. Respecto a "Holocausto Caníbal", ya no me extrañaría nada en absoluto.
EliminarPues si le fuera bien a los dos por mí un empate iba bien, amigo PEPE.
Eliminar:-D es cierto lo que comentas en relación a la época del alunizaje, joer, con aquellos coches que había de tecnología tan rudimentaria y demás, que se llegase allá sí que resulta, visto hoy en día, cuanto menos extraño ;-D ... la verdad...
Saludos
Cierto y además que fueran capaz de despegar de la Luna sin apenas logística ni infraestructuras y que lograsen regresar a la Tierra sin percances.
EliminarEstupendo repaso Sr. Cahiers. Si no lo has visto, yo te recomiendo un falso documental de Peter Jackson de 1995. Lo vi en "el Plus" cuando "el Plus" era casi sinónimo de élite intelectual y me lo estaba tragando como bueno hasta que salió una funcionaria rusa que se llamaba "Alexandra Nevski". Mis conocimientos del cine soviético me salvaron del ridículo total. Es muy bueno y se titula "La verdadera historia del cine".
ResponderEliminarY la moraleja del asunto es que si coges a un lunático y le pones una bata blanca es posible que tragues la estupidez más grande que te puedan soltar. De ahí la necesidad de, en primera instancia, cuestionar todo.
Y otro día hablamos de los documentales paranoicos, los de las conspiraciones... son tremendos. Farenheit 9/11 es uno de ellos.
El género de los documentales sobre conspiraciones son realmente fascinantes, en los que el asesinato de Kennedy ocupa un lugar relevante. A veces pienso que, ese falso documental sobre la Luna, es en cierta medida conspiración. Se bromea sobre algo que se supone serio, para que nadie sospeche que en realidad fue una broma de altos vuelos.
EliminarYo vi el anuncio del documental ese sobre las sirenas y una reseña en un periódico (en la que daban total credibilidad), y también me llamó la atención pero no vi luego ninguna referencia científica al tema, lo que no me pareció normal.
ResponderEliminarPor cierto, he visto parcialmente ese "Holocausto caníbal" e impresiona, las escenas son muy creibles. "Zelig" me gustó pero su formato documental me resultó demasiado pesado, no la considero de las mejores de Allen. En mi lista personal y subjetiva, claro.
Por cierto, el esquema del esqueleto de sirena que encabeza la entrada es una aberración. Como si algún organismo pudiera tener estructuras óseas de distinta composición en su cuerpo... Si existen las sirenas, tendrán o huesos o espinas, pero no mitad y mitad.
Eliminar"Zelig" está muy bien realizado, es una broma perfecta sobre los documentales, aunque bien es cierto que se hace algo aburrida, sobre todo, cuando entra en escena el personaje interpretado por Mia Farrow y esas tediosas sesiones de hipnosis. Ese esqueleto no pertenece al documental, ya que en el mismo parecía apostar más por la estructura ósea parecida a la de los actuales manatíes.
EliminarUna entrada muy interesante. Lo de la sirena me ha recordado la célebre estafa de la llamada Sirena de Fiji. El ornitorrinco es un ser real pero cuando el capitán Cook trajo un ejemplar disecado todos lo tomaron por un fraude.
ResponderEliminarLa que se armó con "Holocausto canibal", ningún falso documental levantó tanta expectación hasta "El proyecto de la bruja de Blair" aunque éste no se hizo pasar por verdadero. Saludos. Borgo.
Es que el ornitorrinco es un animal de lo más extraño, difícil de creer si no lo tienes delante. Pues no estoy muy seguro de que "La bruja de Blair" no quisieran pasarlo como auténtico, aunque hoy en día es complicado dar el pego. Viendo "Holocausto caníbal" a mi no me parece en ningún momento que eso sea real, no se, es mi impresión.
EliminarHola Pepe,
ResponderEliminarSobre las sirenas... ¿quien sabe? Quizás no sean sirenas, sino "Profundos".
http://es.wikipedia.org/wiki/Profundo_(criatura)
Lovecraft tenia razón. ;->
La película capricornio uno es magistral, justamente el otro día en el trabajo salio a colación el tema de Kubrick y su falso montaje del alunizaje... En fin, teorias de la conspiración unas cuantas. Lo mejor es creer la opción más simple, como dijo el detective más grande que haya existido Serlock Homes, ¿como?¿que no es real¿ Como iba diciendo...
Sobre los otros, Holocausto Canibal de momento no la piesno ver, ya vi en el pasado algunas películas Gores, y no se si a mi edad, ya que me queda gusto al respecto.
Y coincido con lo que comenta El Tirador, cuando una noticia no sale en los medios convencionales... tufillo lleva.
Una gran entrada, de las que a mi megusta, misteriosa pero a la par desmitificadora.
Un gran abrazo Sr. Cahiers.
Si las sirenas parecen hombres que querían ser peces, los profundos parecen lo contrario, peces que aspiraban a ser humanos. Respecto a la Luna, pues no crea, en este caso la opción más simple es que simplemente no fueron a la misma. Mucho menos complicado hacer una película que de el pego, y teniendo en cuenta lo perfeccionista que era Kubrick...
Eliminar¡me encantan los falsos documentales, que cuentan historias fantásticas con seriedad y rigor! aunque también te digo que se me borró la sonrisa según balaba por tu artículo, al ver las fotos tan duras que has puesto de canibalismo y tal. Yo, francamente, si puedo evitarlo en mi vida cotidiana hay cosas que prefiero no ver, y con mucho más motivo si se trata de imágenes ficticias, creadas sólo para alimentar la morbosidad y la sed de sangre de esta sociedad enferma
ResponderEliminarbesos,
Bueno amiga Maslama, hágase la idea que esas escenas de canibalismo son muy de mentira, mucho tomate o ketchup derramándose por doquier.
EliminarBueno enseguida que has empezado a comentar lo de las sirenas me he dado cuenta que era falso, pues los griegos las representaban con cuerpo alado y no con cola de pez como las imaginamos hoy:
ResponderEliminarhttp://seguicollar.wordpress.com/2008/09/07/sirenas-en-la-mitologia-griega/
Hay otro falso documental de Orson Welles que me fascina: F for Fake (Fraude)!!!!
Saludos!!!
Los griegos tenían mucha imaginación, aunque lo que ha quedado para la posteridad son esos cuerpos con cola de pez, tal y como son los manatíes, aunque claro el rostro dista mucho de guardar relación con aquellos seres míticos que hacían perder la cabeza a los marineros.
EliminarA mi me gustan mucho los falsos documentales sobre todos de temas de misterio o ucronía, así que me hubiera encantado el de las sirenas.
ResponderEliminarSaludos.
Puede encontrarlo en: http://www.youtube.com/watch?v=D6t7Bf8Zjtg
EliminarSaludos.
Vaya, destrozando mitos hoy ¡eh?... jajajja. Esas 4 sombras con la bandera americana en la Luna, y a merced del viento (al margen de otras evidencias), refuerzan la teoría de que jamás la hemos pisado. Y es que Kubrick es mucho Kubrick....
ResponderEliminarSaludos Pepe
Lo de la Luna es una lucha constante de pruebas irrefutables de que sí y otras de la misma naturaleza de que no. Es un pulso y a saber cual es la verdad.
EliminarYo vi el tráiler creo que en Discovery Max y ya me pareció bastante absurdo lo que porponían. Este martes si todo va bien veré Zelig que hace tiempo que la tengo por ahí. Holocausto Caníbal yo me la creí durante mucho tiempo, ¡el momento tortuga me impactó sobre manera!
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues fíjese que por mucho que lo intenté no logré atisbar ninguna verosimilitud en "Holocausto caníbal".
EliminarPues en alguna emisora de radio han hablado del documental de las sirenas, sin reseñar lo de "falso documental"...lo cual dice muy poco de ese medio, la verdad...recuerdo cuando comentamos el documental de García Lorca...y no sólo fue usted el único que le generó total credibilidad, es que algún periodista llegó a hacerse eco...
ResponderEliminarLo de García Lorca era una hipótesis más creíble. Todo lo contrario al de las sirenas, que según avanzaba se veía cada vez que era una tomadura de pelo.
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